La transformación del flujo de trabajo y la productividad forman parte de los principales aspectos que buscan mejorar las empresas dentro de sus procesos de gestión. Para ello, el mapeo de procesos se convierte en una herramienta importante para lograrlo. En este artículo, analizamos este concepto y veremos algunos ejemplos de su aplicación en procesos empresariales comunes 

El mapa de procesos es una técnica o herramienta de gestión que visualiza el flujo de trabajo dentro de un proceso empresarial. Un mapa de procesos muestra los pasos y las personas que intervienen en un proceso empresarial antes de automatizarlo. 

La creación de un diagrama de proceso es el primer paso para crear un modelo de proceso comercial. Es una simple representación de un proceso que simplemente enumera las tareas en orden secuencial.  

Un mapa de procesos es el segundo paso en la creación de un modelo de procesos. El mapa incluye mayores detalles e información, enumera aspectos como el número de empleados involucrados y el plan de acción. Entonces, un modelo de procesos de negocio es una representación visual completa de todos los aspectos de un proceso en específico. 

Por tanto, resulta fundamental comprender los diferentes papeles y funciones de los diagramas de procesos, el mapeo de procesos y el modelado de procesos.  

Para la elaboración de un mapa de procesos, es necesario analizar y elegir el tipo de mapa que más conveniente y útil. Existe una amplia variedad entre los que se puede elegir, sin embargo, se deberá escoger aquel que se ajuste a sus objetivos. A continuación, presentamos cuatro tipos de mapas de procesos: 

• Mapas de flujo de valor: muestran los pasos necesarios para la entrega de un producto o servicio al usuario final. Los mapas de flujo de valor son útiles para identificar residuos y planificar proyectos futuros. 

• Diagramas de flujo: mapas que muestran los pasos de un proceso, incluidas sus entradas y salidas. Existen tres tipos de diagramas de flujo: diagramas de flujo descendentes, muestran los pasos de un proceso en un único flujo; diagramas de flujo desplegables, identifican quién realiza cada tarea; y los diagramas de flujo detallados, amplían ambos y muestran un nivel de detalle mucho mayor. 

• Diagrama de flujo de datos: como los diagramas de flujo, pero centrados en el flujo de datos a través de un sistema.

• Diagramas Swimlane: también llamados mapas interfuncionales, muestran quién hace qué. Las actividades se separan en “carriles de natación” en función de quién es responsable de cada tarea. Estos diagramas son útiles para la gestión y la automatización del flujo de trabajo. 

El mapeo de procesos es una herramienta de gestión eficaz que ayuda a las organizaciones a comprender y mejorar los procesos de negocio. A través de la implementación de nuestras soluciones Dynamics365 y Microsoft36, podrá crear de manera sencilla, mapas de procesos para mejorar la gestión de su organización y así, potenciar su flujo de trabajo y productividad.  

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